Enhorabuena, conseguiste que un blog te hiciera una reseña. Ahora toca lidiar con ella. ¿O creÃas que todo era tan sencillo? Pues no, amigo mio, ahora viene una de las partes difÃciles.
Seamos sinceros, cualquier persona que se dedique a algo creativo termina teniendo que enseñarlo al público, y por consiguiente estar expuestos a crÃticas. Además, las personas que se dedican a crear tienen en general una saludable tendencia a la inseguridad, asà que hay algunas cosas que es necesario recordar.
Nunca llueve a gusto de todos
Esto es una verdad universal. Seguro que conoces a alguien a quien no le gusta el chocolate. Pues con los libros, lo mismo. Hay personas que no han conseguido leer alguna de esas novelas aclamadas como grandes clásicos de la literatura universal. Gente a la que no le gusta un autor o una obra en concreto aunque otras del estilo sÃ....
Tu libro no puede (y no debe) gustar a todo el mundo. Acéptalo. Asúmelo. Y luego pasale una circular a tu tierno corazón, porque antes o después va a sufrir. Los lectores están en su perfecto derecho de no amar tu libro como lo amas tú. No lo hacen por hacerte daño. Ni porque sean tontos. En serio.... borra eso de tu disco duro y abre los brazos a las crÃticas, que son una herramienta de crecimiento si tú les dejas
Reseñador random, visión del autor
De palmeros y haters
Seamos sinceros, hay tres tipos posibles de crÃticas: las de los palmeros, las de los haters y todas las demás.
Todo es fabuluso
Esto es lo que te dice un palmero. Todo es fabuloso. Todo es genial. El libro les ha encantado. Incluso cuando luego no son capaces de decir nada positivo del mismo. Les enganchó, les encanta la trama, los personajes y los giros son geniales. Por que sÃ, porque tú lo vales y eres fabuloso. Igual en goodreads le ponen tres o dos estrellas, pero la cuestión es que les ha flipado de lo lindo.
A ver, que eres fabuloso y que tu libro es lo mejor que ha escrito humano alguno desde la Epopeya de Gilgamesh ya lo sabÃas... ¿no?
El palmero hace ese tipo de crÃticas que no sirven para nada. O incluso al contrario, sirven para arruinarte la vida. Porque tu ego, amigo escritor, es una criatura frágil y asustadiza, pero también puede hincharse como un pez globo e impedirte aprender y madurar tu estilo.
Palmero estandar, habitualmente alguien que te quiere o que no quiere ponerse a malas contigo
Grinch 2.0
Justo en la otra punta del espectro del crÃtico está el hater. Odia tu libro. El libro es un auténtico desastre. Los personajes son inverosÃmiles, no hay manera de creerse la trama, la ambientación está mal y tu estilo es de niño de primaria. Escribes cosas desagradables. Habitualmente cuando describen lo desagradable que ha sido una escena, citan cosas que en realidad no ocurren. Vamos, que te odian por odiar.
Además suelen ser crueles en su redacción, en la cual te nombran (muchas veces por el apellido, intentando alejarse intelectual y personalmente de ti como si tuvieras la peste todo lo posible.
Bueno, alguna razón habrá. Preguntemos a su psicólogo
Cuidado con esto. SÃ, hay haters. Si te tocan, los reconocerás a la legua. Pero no todas tus crÃticas negativas van a venir de haters. Si crees eso, posiblemente hayas escuchado demasiado a tus palmeros (o tienes un ego del tamaño del de Arturo Pérez-Reverte). Incluso en la crÃtica más hater puede haber retazos de verdad. No te cebes en ellas, porque pueden hundirte en la miseria para siempre, pero planteate aquellas cosas que varias personas te señalen. Lo mismo sales fortalecido del envite.
La procesión va por dentro
Te voy a reconocer una cosa. Estás en tu derecho de que una crÃtica te duela en lo más profundo. Pero es importante que te comas ese dolor y sigas adelante.
No critiques a tu crÃtico. El que escribe esa reseña en la que señala puntos débiles de tu libro no es un idiota que no ha entendido toda su magnificencia, ¿vale?
La persona que reseña tu libro es un ser humano que se ha tomado la molestia de leerte y después publicitarte, con sus más y sus menos. Es al menos tan inteligente como tú y si hay algo que no ha entendido, amigo, eso es absolutamente culpa tuya por no ser capaz de transmitirlo bien. Ponerle comentarios insultantes o paternalistas (o enviar amigos, o usar cuentas fake para hacerlo) no habla bien de ti. Nunca.
Recuerda siempre
Hasta pronto
No discutas con tu crÃtico. Ni en privado. Si la persona que te ha hecho la reseña es tu amigo, posiblemente puedas hablar largo y tendido de uno o dos puntos por email o tomándote algo por ahÃ, pero en la mayor parte de casos esto jamás ocurrirá. No le digas a tu reseñador que algo que él te indica simplemente no existe. Puede que exista y tú no te hayas dado cuenta. Pasa más a menudo de lo que crees. Puedes analizarlo con él si hay confianza o tú por tu cuenta... Pero decirle que está muy equivocado, aunque sea por privado, tampoco habla bien de ti. Y recuerda que los bloggers hablan entre ellos.
No rompas la buena relación por redes. Para conseguir tus reseñas es posible que te hayas currado una buena relación por redes sociales con un puñado amplio de blogs. No la cagues solo porque una crÃtica no te ha molado. Ese blog puede darte una buena reseña otro dÃa, o ayudarte de otra manera. Y si no él, alguno de sus amigos y conocidos. Dar por respuesta el más absoluto silencio tampoco es una buena forma de responder.
En resumen. Se maduro. Has escrito un libro, y estás cosechando crÃticas. Es normal que alguna sea negativa, o que siendo positiva señale cosas negativas. Úsalas para crecer y no para convertirte en una fuerza vengativa y destructiva, ¿estamos?
Hasta pronto
